Ingredientes porción 4
Azúcar 1,5 tazas
Huevo de gallina 3 piezas
Nata agria 200 g
Harina de trigo 1,5 tazas
Mantequilla 50 g
Sal ½ cucharadita
Detergente de soda ½ cucharadita
Colorante alimentario al gusto
Instrucciones de cocción 30 minutos
1 Derretir la mantequilla y dejar enfriar a temperatura ambiente. Batir los huevos y el azúcar hasta que estén espumosos. A continuación, añadir la nata agria, la mantequilla, la sal y el bicarbonato (aderezado con vinagre). Amasar todo de nuevo y sólo entonces añadir la harina tamizada (se puede añadir un poco de vainilla a la harina). Mezclar hasta obtener una masa homogénea sin grumos. La mezcla debe formar una masa cremosa.
2 Ahora divide la masa en tantos trozos como colores tengas, repartiéndolos en distintos cuencos. A continuación, añade los colorantes a los cuencos (lee en el envase cómo manipular el colorante alimentario).
3 Coge una fuente de horno y engrásala con aceite vegetal. Vierta con cuidado un color de masa en el centro. Deja que se extienda un poco. Si no es así, haz suaves movimientos circulares con el molde y la masa se extenderá uniformemente. Del mismo modo, vierta suavemente otra mezcla de color en el centro, una tercera, etc. Tómate tu tiempo, tienes que dejar que la masa fluya.
4 Ya sólo te queda meter el molde en el horno precalentado a 200-250°C y comprobar que el bizcocho está listo en unos 30-40 minutos.
Sugerencia de la receta El pastel terminado puede cortarse en capas y untarse con crema agria (media taza de azúcar por cada 200 gramos de crema agria). ¡Gracias por la receta a Katerina Foo!
